El 19 de septiembre de 1982, Scott Fahlman, científico de cómputo en la Universidad Carnegie Mellon, Estados Unidos, envía un mensaje donde propone el uso de los emoticons.

Estos símbolos consideró Fahlman, podrían ayudar a las personas en un tablón de mensajes electrónicos a distinguir entre “mensajes reales y bromas”.

Propuso que se usaran 🙂 y 🙁 para este propósito, y los símbolos agradaron.    

El mensaje original se había perdido y fue recuperado en el 2002 por un equipo de especialistas de cómputo que buscaban validar el origen de los emoticons, que todavía se disputa.

Aunque hasta ahora se reconoce a Fahlman como el creador de los primeros enmoticons.

La traducción del mensaje es el siguiente:

Propongo la siguiente secuencia de caracteres para marcar bromas:

🙂

Lease de lado. En realidad, es probable que sea más económico marcar

cosas que NO sean bromas, dadas las tendencias actuales. Para esto, úsese

🙁

Scott Elliot Fahlman,  se destaca por su temprano trabajo en planeación automatizada en un mundo de cubos, en redes semánticas, en redes neuronales (y, en particular, el algoritmo de correlación en cascada) y lenguaje Lisp.